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Ya sé que no pasa nada

Hay una frase que escuché hace unas semanas que me ronda por la cabeza. Me parece una definición perfecta de la vida. Como ya sabéis en la web seguimos de cerca La Voz Kids y en uno de sus encuentros, Melendi contó una anécdota sobre uno de los niños. Un inciso… Gracias Bea por ser mis oídos. Porque si esto se me llega a pasar nunca hubiera pensado en algo tan obvio.

Uno de los niños, en las audiciones a ciegas, que supongo que todos o casi todos sabréis la dinámica del programa, al no darse la vuelta ningún coach todo el público empezó a gritar ¡No pasa nada! ¡no pasa nada! ¡ no pasa nada! El niño miró asombrado se encogió de hombros y espetó… Ya, ya sé que no pasa nada.

Me muero… Solo le faltó decir, ¡qué clase de problema tenéis! En sí parece una tontería pero tiene un trasfondo de esos que me apasionan a mí. Desde niños nos inculcan unas cosas que no vienen de serie cuando naces. Me explicaré mejor. A los niños se les estimula o alecciona de una manera a veces no natural. Espero saberlo explicar.

Este niño, sabía que eso no era un drama pero para un adulto quizás sí. Tendemos a pensar que es un fracaso, que no valemos si no nos cogen… y este niño en ningún momento pensó que no valía. Igual no valía en ese lugar pero él sí era consciente de que era grande y si no era en ese sitio en otro ya sabrían valorar lo que él poseía.

Me parece el trasfondo más de verdad que puede tener el ser humano pero a lo largo de la vida eso va cambiando por las decepciones, los golpes, los arañazos y sobre todo por hacer una coraza frente al que ataca. Si todos siguiéramos en esa línea de verdad y bondad nos ahorraríamos tener que ponernos una burbuja a la hora de afrontar los golpes.

Porque no es la manera de nacer y quizá es la forma más fácil de aprender. En el mundo hay personas muy buenas y personas que no lo son. Siempre te encuentras de los dos pero yo siempre digo que prefiero aleccionar el cerebro para quedarme con lo positivo. Pienso que si enseñas a tu mente a dirigir tus pensamientos es un ejercicio bastante bueno para poder sobrevivir en calma.

No podemos dirigir a las personas porque cada uno tiene una manera de ser pero sí enfocar y poner la mira en lo que quieres para ti. Y yo prefiero quedarme con lo bueno porque lo malo no hay duda de que te enseña pero tiene una doble moral que te puede curtir de una manera negativa.

¿Por qué llegas a una edad donde una decisión de otra persona te puede llegar a afectar? ¿por qué no creemos más en nosotros? Insisto y creo que es algo que se debe de educar ya que desde niños tenemos que protegernos de alguna manera en la edad adulta. Pero también pienso que nunca deberíamos perder esa inocencia que en un adulto se pensaría que es hasta chulería. Como nos cambian los años…

Son dos maneras de ver las cosas pero con algo en común que es creer en ti tengas la edad que tengas.

Images: Pinterest

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