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Ricky Martin llega en lancha a su concierto entre montañas y demuestra que su éxito mundial no es casualidad

Era el concierto más esperado de Pirineos Sur. Ricky Martin llegaba hasta el escenario flotante de Lanuza en un lancha desde el embarcadero de este bonito pueblo del pirineo oscense causando el furor de todos los asistentes.

Pero su bajada de la lancha traía consigo una sorpresa. Antes de empezar un show (spoiler) apoteósico, el puertorriqueño fue galardonado por su talento y por su gran contribución a la popularización de la música latina en nuestro país y en la escena mundial. La Diputación Provincial de Huesca le entregó el Premio Pirineos Sur en la modalidad ‘Diversidad Cultural’. El acto se celebró en el mismo anfiteatro, pocos minutos antes de la actuación.

Ricky levantó a la gente de la grada desde el primer minuto al ritmo de algunas de las canciones latinas más exitosas de las últimas décadas. El cantante ha recalado en Pirineos Sur dentro de su exitosa gira internacional, cargado de los hits con los que ha cosechado éxitos a lo largo de tres décadas firmando un concierto redondo que certifica que la corona del ‘Rey del pop latino’ sigue indiscutiblemente en su posesión. 

Desde la primera canción no soltó el acelerador pero la segunda canción en sonar enloqueció al público, ‘María’, ese imperecedero tema de perfecto latin pop con el que conquistó continentes hace ya casi 30 años. Ricky, que se dirigió a los fans y espectadores en más de una ocasión pero sin duda la que más gusto a los lugareños fue su deseo de quedarse en un enclave tan espectacular: “Qué suerte estar aquí esta noche, en esta tierra tan preciosa, qué suerte tienen, me voy a mudar aquí”. El show ha continuado con los siete bailarines marcando el ritmo, con coreografías casi perfectas. Y con Martin ya totalmente desatado, bailando y derrochando carisma, acompañado de una enorme banda de nueve músicos, dirigidos por el reputado productor David Cabrera (Sting, Quincy Jones…).

Con ‘Adrenalina’ ha dejado constancia de lo bien que se ha adaptado a los nuevos tiempos, un reggaeton con el que ha hecho sacudir las caderas. Ha continuado por esa senda del latin pop, para goce de sus seguidores que han bailado y cantado “Shake your bon-bon”, “Lola, Lola” mezclada con “La bomba” y “She bangs”.

A mitad del concierto ha disparado a los corazones del público, con esas baladas con las que ha levantado suspiros de jóvenes y no tan jóvenes durante años: “Disparo al corazón”, “Asignatura pendiente”, “A medio vivir” (con un sobresaliente arreglo de saxo) y la muy coreada “Te extraño, te olvido, te amo”. Pero para el final aún guardaba algunos de temas más infalibles, con los que Lanuza se vino abajo: “La mordidita”, “Por arriba, por abajo”, “Vente pa’ ca’”, “Livin’ la vida loca” y “La copa de la vida” (goles de España en la Eurocopa por la pantalla incluidos). Triunfo incontestable de un artista que tras más de tres décadas marcando el ritmo del pop latino y derribando barreras, tiene aún mucho que aportar.

Images: Cortesía Pirineos Sur para Living Backstage.

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