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Graciela, la inesperada protagonista del desfile de Lola Casademunt, que arregló el vestido a Nieves Álvarez minutos antes del desfile

Faltan 50 minutos para que Lola Casademunt by Maite presente sus propuestas en el marco de esta nueva edición de MBFWM. Me acerco al backstage para ver cuántas salidas tiene Nieves Álvarez durante el desfile, es imagen de la marca y normalmente abre y cierra el show pero esta vez tiene un tercer cambio que se producirá a mitad del desfile.

Cuando miro las fotos del fitting veo que cierra con un vestido que cose una señora en una esquina del camerino que les asignan a los diseñadores en el pabellón 14 de IFEMA. Me llaman la atención sus manos, que luego me confirma que han cosido prendas de diseñadores de todo el mundo o prendas de empresas como Tendam (uno de los principales grupos en Europa del sector de moda y más importantes del mundo con 2.000 puntos de venta, en el que se encuentran firmas como Cortefiel o Pedro del Hierro). Tiene a su lado una maquina de coser antigüa, varias bobinas y no lleva gafas. Mi compañera de mesa le pregunta si no las necesita y nos cuenta que pese a su edad, ve muy bien, excepto para ver la tele. Y queremos saber más porque Graciela, nos gana en experiencia y al final de la charla también el corazón. ¿Sabéis cuál es la mejor escuela para aprender este oficio? Nos pasan por la cabeza las mejores escuelas del mundo y ella nos responde que la tenemos en casa; nuestras abuelas. Aunque nos confirma que si no la tienes… la cosa se complica. En España tenemos los mejores oficios y como nos comentaba Duyos, que se fue a las Islas Canarias a aprenderlos para su nueva colección, desgraciadamente se están perdiendo.

Volviendo a Graciela, nos da una materclass de patrones, talleres y gajes del oficio. Le insisto varias veces que no la queremos entretener, quedan pocos minutos para que termine de dar forma al vestido, lo está ajustando al cuerpo de Nieves, unos pequeños retoques, milimétricos, para que luego todo engrane perfecto, porque esto es una cadena de mucha gente. Tiene varios alfileres metidos en la enorme roseta de la parte frontal y distrayéndola me da pánico que se deje alguno y Nieves se pinche. ‘Tengo ahora que hacer una pinza aquí, ¿lo veis?’. Y las dos pensamos que esto es algo que nunca entenderá la inteligencia artificial. ‘Los tengo que sacar todos porque sino Nieves me dirá, ¡Gracielita pero qué has hecho!’ y enseguida y por sus maneras entendemos que es una frase que nunca llegará. Tiene todo atado y más que atado. ‘Esto es cuestión de práctica, luego el traje tiene que quedar como antes de ajustárselo a Nieves, no hay que dejar marca’.

Nos habla de la necesidad de aprender, de coger auxiliares de las academias para que sigan con el oficio… la reclama todo el mundo del backstage y queremos aprender más pero se ha hecho la hora del desfile y tenemos que irnos a nuestro asiento. Cuando veo salir a Nieves con el vestido pienso en Graciela y en las manos de toda esa gente que sostiene nuestro país a base de esfuerzo. Un legado que tiende al olvido pero que resiste en una esquina en la que sin ella no habría habitación.

Images: Living Backstage (copyright prohibida su difusión sin citar su procedencia) y cortesía MBFWM IFEMA.

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