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La superación le lleva a ‘De la Cierva y Nicolás’ a crear una de las colecciones con más belleza de MBFWM

La colección “Ímpetu” de ‘De la Cierva y Nicolás’ cierra una trilogía conceptual que explora el viaje emocional y sensorial del ser humano, iniciada con “Lachryma” (el instante de la emoción contenida, representada en las lágrimas) y seguida por “Éter” (la suspensión del tiempo, el equilibrio entre la emoción y la calma, de inspiración brutalista).

Como cierre de esta narrativa, “Ímpetu” representa la culminación del proceso emocional: el momento en el que la energía acumulada se libera, se rompe la contención y surge la transformación. Inspirada en fuerzas naturales como tormentas, volcanes y movimientos tectónicos, esta colección captura la esencia del impulso inevitable hacia el cambio, hacia una nueva etapa, hacia el futuro.

“Ímpetu” significa fuerza, determinación y energía interior capaz de impulsar la acción. Esta colección celebra la valentía de enfrentarse a lo desconocido, la pasión por avanzar pese al miedo y la rabia que impulsa la revolución personal. Los diseños reflejan esta energía interna mediante siluetas audaces, tejidos dinámicos y cortes dramáticos, simbolizando la ruptura de las barreras internas para revelar la autenticidad y la fuerza interior. En definitiva, “Ímpetu” no solo cierra un ciclo estético, sino que simboliza la liberación personal, el despertar emocional y la belleza de la transformación.

Esta colección surge de una necesidad visceral, de una energía cruda e imparable que impulsa la transformación. Se alimenta de la pasión que incendia, del deseo que impulsa, de la rabia que sacude y de la lucha que reinventa. Como una erupción volcánica o el estallido de una tormenta, cada pieza representa ese instante en que algo irrumpe y se libera. La fuerza de los elementos —el mar, el fuego, el viento, la tierra— dialoga con el cuerpo en movimiento, capturando expresiones físicas, gestos de danza y momentos de pura expansión. Es una explosión emocional que se manifiesta a través de formas y materiales.

La gama cromática explora tonalidades inspiradas en la lava y la oscuridad: rojos volcánicos, negros profundos, reflejos metálicos y texturas que evocan piedra y humo. Los tejidos, escogidos por su impacto visual y versatilidad, abarcan desde plisados definidos hasta lanas técnicas, organzas rasgadas, tules rígidos y gasas deshilachadas. Las siluetas, con dinamismo y asimetría, evocan el estallido del ímpetu: volúmenes que emergen, estructuras que giran o se abren paso. Ímpetu no viste, interpreta. Es energía, ruptura y renacer

Images: Cortesía de IFEMA para Living Backstage

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