Llegué a ‘Voces’ de una manera inesperada. La tecnología me llevó a la raíz. Vi en una red social que Sara Baras acababa de llegar con su espectáculo a Madrid y saqué las entradas movida por algo que descubrí varios días después.
Cuando me dispuse a comprar varias localidades estaba todo agotado. Probé para la semana siguiente y la indecisión de la búsqueda me llevó a perder las últimas que quedaban. Un sábado fue mi día de suerte y el primer ‘taconeo’ fue a golpe de click.
Cuando llegué al Teatro Nuevo Apolo de Madrid la cola se extendía por toda la Plaza Tirso de Molina y un cartel de Sara Baras inundaba la fachada del teatro. Nunca la había visto en directo y sabía lo justo sobre ella pero me llamó la atención la cantidad de ciudades que ha recalado con ‘Voces’.
En París en el Teatro de Champs Elysees donde permaneció en cartel durante un mes convirtiéndose en la artista que más actuaciones y público ha cosechado en la historia del teatro y que la ha llevado por teatros de todo el mundo como el Teatro Bellas Artes de Méjico DF, el City Center de Nueva York, el Kennedy Center de Washington DC, el Performing Art Center de Miami, el teatro Orb de Tokio, el Concert Hall de Hong Kong, el Sadler´s Wells Theatre de Londres, el Auditorio de la Conciliazione de Roma, el Zorlu Center de Estambul, La Opera de Dubai, el teatro Esplanade de Singapur o Hamer Hall de Melbourne entre otros y en importantes teatros de la geografía nacional. Mas de 500mil espectadores ya lo han visto en todo el mundo.
Me quedé sin respiración ante tanta expectación. Cuando se abrió el telón se sintió un frío helador y ella se encargó de dejar el terreno acogedor. Ella, su cuerpo de baile y el artista invitado, los de las palmas y jaleos, toda una revolución al milímetro perfecto. Un control y una sincronización fruto del tesón.
‘Voces’ es un homenaje a grande figuras del flamenco que nos han regalado su arte como Enrique Morente, Camarón, Antonio Gades o Paco de Lucía, entre otros. El desencadenante de la creación de este espectáculo fue la muerte de Paco de Lucía, que dejo un vacío muy grande y provocó que Sara sintiera la necesidad de agradecer de alguna manera todo lo que el Maestro hizo por el flamenco y por todos siempre desde el máximo respeto.
En cada movimiento iba entendiendo más cosas. Hay gente que tiene éxito y hay gente que triunfa y llega. Sara es de las segundas, para las que como yo, pedimos perdón por no haberla conocido antes, de las que como yo, hemos tenido que leer su triunfo y saber que hay un trasfondo lleno de talento que sabe conquistar las emociones.
Yo creo que en la vida hay determinadas personas que tienen una manera de transmitir diferente, de tal nobleza que encima van por el mundo homenajeando a otros.
Habló en los silencios, calló en el ruido, cerró los ojos y abrió el corazón. Miró sin miedo, sonrió al público y se sintió el júbilo. Un hilo argumental unido por un sentimiento mundial. Sara Baras es técnicamente perfecta pero sabe que en la vida la huella la deja la riqueza humana.
Al día siguiente leí varias entrevistas, entonces entendí todo un poco más. Sara Baras habla de manera pausada y se emociona con facilidad. Escucha lo que le dice la vida y se nutre del respeto. Estoy agradecida de que alguien lleve el nombre de España con tanta emoción como ella, porque en este país eso siempre nos ha unido y ella lo ha entendido.
Es sincera en es el escenario y aunque el espectáculo nace de un momento duro ella lo representa puro, con verdad y sentimiento, el mismo que la gente pone desde el asiento cuando se baja el telón y te falta hasta el aliento.
Images: sarabaras.com
