in , , ,

Entrevista a Abel Pintos: ‘Cada etapa de mi vida estuvo atravesada por la música y gracias a eso aprendí el sentido del respeto’

Abel Pintos sube en el ascensor hacia la séptima planta de Sony Music y este equipo lo hace segundos después. Cuando se abren las puertas podemos ver la calurosa bienvenida por parte de la discográfica, nos echamos a un lado y me sorprende su calma mientras intento que el corazón no se me acople al hilo musical.

En un ídolo en Argentina y en segundos me doy cuenta que la emoción es universal. Llevo días leyendo toda su trayectoria y me tiene impresionada su intelectualidad. Es profundo de mirada, analista de detalles y armonioso en las maneras.

Lleva 23 años de carrera y no ha perdido la emoción de recibir, que a fin de cuentas es la de darse. Que a veces es complicado con quien no conoces pero así son los artistas, generosos en cualquiera de sus formas expresivas.

En la retina tiene el reflejo de emociones compartidas y su calidez vocal llenó hace unos meses el River Plate de Argentina, 50.000 personas, dos noches consecutivas. Probablemente Abel Pintos sea la mejor representación de las personas honestas. Me sorprende su memoria y sólo espero que del público español recuerde la humildad de acoger, a quien nos sabe remover, hasta lo que no se puede ver.

IMG_9789

Abel, eres un ídolo en Argentina, llevas desde los once años cantando, vendiste de este último disco 40.000 copias en 6 días… Para los que no te conozcan en nuestro país ¿Quién es o cómo es Abel Pintos?

Empecé a cantar a los ocho años en un coro, a los once comencé como solista y mis primeros conciertos fueron en el colegio, todo se dio muy rápido en la ciudad donde vivía que se llama Bahía Blanca, una ciudad de medio millón de habitantes.

Grabé un disco, cassette en ese momento, de forma independiente y de repente me encontré tocando mucho y teniendo mucho público. Dos años después llego un cantante de tango muy conocido a la ciudad a dar un concierto, yo le dí un demo de lo que iba a ser mi nuevo disco, él se lo llevó a Buenos Aires, se lo dio a un productor, el productor lo escuchó, le gustó y a la semana estaba en Buenos Aires firmando un contrato con su productora artística.

De ahí nos fuimos a Sony, firmé mi primer contrato discográfico, más tarde fuimos a casa de Leon Gieco, que es una leyenda de la música en Argentina y América Latina, a proponerle que produjera el disco y un mes después estaba grabando el disco con León y a partir de ahí no paré nunca más de tocar ni de hacer discos.

Llevo 23 años de carrera y 11 álbumes editados. En un mes, vamos a editar un disco que se va a llamar ‘La Familia Festeja Fuerte’ de unos conciertos que hicimos en el River Plate en mi país y así se llama la gira que me trae a España ahora en mayo, finaliza en Argentina en octubre y con el que vamos a recorrer varios países.

abel-pintos-foto-nota

La Familia Festeja, ‘fuerte’… ¡en Argentina no os andáis con tonterías!

Los conciertos en el River fueron muy grandes y también muy simbólicos. Por muchos motivos quedó muy reflejado en esas dos noches el tipo de relación que tenemos con el público después de 23 años.

Mucho público nuevo de hace tres o cuatro años pero también personas que desde hace 23 años venían a pizzerías, bares, teatros y ahora a estadios a verme, crecimos juntos. Eran niños cuando yo era un niño y ahora vienen con sus hijos y siguen viniendo con sus padres y eso genera un clima muy familiar.

El mejor ejemplo es que teníamos sábado y domingo para hacer el concierto, por una disposición del club tuvimos que pasar el concierto del domingo al lunes, lo cual generó un trastorno bastante importante porque mucha gente que viajaba de muchos puntos de Argentina tenían que regresarse a trabajar. No podían quedarse, entonces la gente que vive en Buenos Aires y que tenía entradas para el sábado y que ir el lunes no les generaba problemas, les cambiaban su entrada a la gente del interior que no podía ir el lunes.

De repente se lo cambiaban a gente que tenía fila tres por alguien que tenía a lo lejos y en las redes sociales recuerdo a una chica diciendole a un chico, no me parece justo el cambio porque yo te estoy dando una entrada muy lejos y tú me estás dando una entrada muy cerca que te costó mucho. La respuesta del chico fue… lo importante es que acompañemos al flaco, da igual desde dónde.

Eso es una familia y nos ganamos el derecho a nombrarnos de esa forma. Luego porque es un festejo cada concierto y ‘fuerte’ porque en Argentina hay una expresión que se usa mucho, como una forma de potenciar algo.

-Dicen que eres el niño mimado de España, cuéntanos eso. No sé si es por las colaboraciones de lujo que tienes con artistas de nuestro país…

Puede ser. Todas las colaboraciones las hice con gente a la que quiero y que admiraba previamente y luego aprendí a querer, con quien nos convertimos en algunos casos en grandes amigos como en el caso de Rozalén y en otros casos en muy buenos colegas como Pablo Alborán, que lo vi sólo una vez en la vida pero el momento que compartimos fue algo increíble.

Y Serrat que para mí es una especie de semi Dios y que no puedo incluirlo en ninguna categoría, él ha sido muy cariñoso y generoso conmigo, fue un sueño cumplido.

Desde mi primer viaje a España hasta hoy siempre conozco a un artista nuevo y lo increíble es que nos caemos bien. Hay artistas que admiro mucho, nos hemos sentado y no ha habido ni una chispa y les he dicho, prefiero seguir comprando tus discos y no hacer una colaboración que no sea genuina. Como dice la canción de Calamaro ‘se nos ve el plumero a los dos por igual’. Al final se te nota si no es real.

r abel

¿Y en esta visita qué artista es el afortunado?

Me quedaría con Vetusta Morla que además de casualidad me los encontré en la calle.

-He leído que siempre te resultó más fácil decir las cosas a través de la música… ¿Por qué?

No sé el motivo, lo que sí sé es cómo sucedió. Yo era un niño enérgico, cariñoso y comunicativo pero el mejor ejemplo es que cuando algo me daba miedo podía decir que me daba miedo pero no podía explicar qué me provocaba miedo, no encontraba las palabras adecuadas.

Lo que me pasaba es que había muchas canciones que hablaban de eso, les daba play… mi familia las escuchaba e interpretaban qué me estaba pasando. Años después de ese ejercicio dije, igual canto y me siento mejor y así empecé a cantar, fue por eso.

A día de hoy tengo muchas ambiciones artísticas pero sigue siendo para mí la forma más concreta. Me encanta conversar pero todo el palabrerío de una conversación siento que no dice ni la mitad de lo que yo sentiría cantando, me expreso mejor. La literatura me gusta mucho y sí sé poner palabra a cada emoción o sentimiento que tengo pero de niño no podía y la música sirvió como lenguaje.

Después de tantos años de carrera… ¿Cuál consideras que es tu gran logro?

Yo creo que el hecho de despertar cada día y enamorarme de lo que hago. No es un logro intelectual porque no es construido, no trabajo eso, no lo pienso pero intento hacer todos los días lo necesario para que el contexto donde voy a hacer aquello tan genuino sea también un contexto genuino.

Que yo pueda hacer todo lo que quiero hacer, todo lo que los demás esperan que yo haga de una forma armónica. No el capricho de hacer sólo lo que yo quiero independientemente de que a los demás les sirva, ni la obsesión de hacer lo que los demás esperan de mí. Esa armonía es difícil de lograr pero yo creo llevarlo bastante bien.

abel

¿Qué es lo que más has aprendido de la música?

Al haber empezado siendo un niño y no haber interrumpido nunca mi relación con la música hasta el día de hoy, cada etapa de mi vida estuvo atravesada por la música y como protagonista fundamental. Aprendí todo lo que un ser humano aprende en cualquier etapa.

Por ejemplo, en la infancia nos enseñan mucho el sentido del respeto, gran parte de mi sentido del respeto también me lo enseñó la música. Más allá de mis impulsos de querer ir a jugar con mis amigos al fútbol al aire libre en invierno entendí que yo tenía que respetar el esfuerzo de mucha gente que pagaba una entrada para ir a verme el sábado. Entonces que el miércoles podía ir a jugar al fútbol pero mejor por la mañana que hace menos frío y así en cada etapa.

En la adolescencia en el caso del libertinaje que también tienes que controlar, quiero vivir todo… pero que nada de eso me lastime. Hoy mismo siento estar entrando en contacto con el concepto de madurez. Aprendí a vivir básicamente, porque elegí la música como forma de vida.

Leiva está presente en tu último disco… ¿Cómo fue trabajar con él?

Fue maravilloso. Tuvimos cuatro o cinco encuentros de colegas, hablando cero de música, yo era fan de Pereza pero hasta el sexto encuentro que tuvimos él no sabía nada de mí como músico, cero.

La primera vez que canté para él en su casa dijo… ‘ostia tío ¡es la primera vez que te oigo cantar!’ A los tres días estábamos grabando canciones. Aprendí muchísimo y Leiva fue una pieza clave de esta sensación de empezar a entender la madurez desde lo emocional pasándolo a lo musical. Le brindó al disco la elegancia que lo caracteriza y que yo necesitaba que tuviese. Le brindó el atrevimiento pero elegante al mismo tiempo.

Nos ha llamado la atención la historia del número Once, título de tu disco… ¡Mucho simbolismo!

Es justo eso, un símbolo. Para tener relaciones sabias tenemos que tener presente el concepto de individualidad, el propio y el del otro. Para elegir relacionarnos con el otro, por lo que el otro es y por lo que uno es, más que por los intereses compartidos.

Me parece bien que haya intereses compartidos pero no creo que tengan que ser más fuertes que el individuo. Un día me di cuenta que el 11 aparecía en muchas cosas, era el disco número 11, compuse 11 canciones… lo veía por todas partes aunque pensé igual soy yo que estoy obsesionado y el productor me dijo… ‘soy yo, o durante todo el proceso está saliendo mucho el número 11’.

Le dije mira, estoy de acuerdo, además pensé que podía funcionar bien porque en la numerología el 11 es un número sabio y al final para existir, necesita de la coexistencia de dos individualidades muy fuertes como son números uno, todos queremos ser número uno en algo y ahí están conviviendo esos dos números uno de forma armónica e individual para crear algo tan sabio como es un número 11.

Abel-Pintos–-11

Como cantautor… ¿prefieres escribir desde la calma o la vorágine? ¿dónde crees que mejor brotan los sentimientos?

Yo siempre asemejo lo que me pasa a mí escribiendo una canción con el llanto de emoción o con la carcajada. Uno no puede programar que el jueves va a llorar o va a reír. Algo hay que funciona como disparador de cosas.

Son dos extremos. ¿Cuánto puede durar un llanto o una carcajada? ¿15 minutos? eso me lleva a mí escribir una canción. Sale la música y la letra al mismo tiempo a veces completa o no pero puede pasar en cualquier contexto.

He escrito canciones con una vela en mi casa como la mayoría piensa que escribimos (risas) o haciendo deporte, en un concierto, en una conversación. Yo no lo escribo, todo sucede en mi mente así que naturalmente puedo estar en una conversación y estar componiendo en otra vía de mi cerebro que luego va a quedar grabado todo el tiempo necesario hasta que me siente para hacer un disco y les cante las 14 canciones que tengo en la cabeza.

¡Qué buena capacidad!

Me pasan dos cosas, soy muy malo recordando nombres pero con todo lo demás tengo muy buena memoria, durante muchos años me quejé de que en la primaria todos mis profesores me enseñaban a memorizar y no comprender.

Memorizaba textos eternos pero no comprendía ni una sola palabra, eso ha hecho que hoy me preguntes cómo se divide por tres cifras y yo no lo recuerde porque memorizaba, no comprendía pero por algo suceden las cosas porque hoy todo ese ejercicio de memoria me sirvió para esto ahora.

Cuál es el tema recurrente en tus canciones y del que nunca dejarás de hablar…

Las cosas que trabajo mucho espiritualmente… el amor, la soledad, la distancia… Son temas muy recurrentes en mi vida y con los que voy teniendo distintas etapas, la relación conmigo mismo… yo analizo cada cosa que me pasa. No me refiero sólo a situaciones sino a cada sensación interna, soy bastante intenso.

¿Le das muchas vueltas a las cosas?

Sí pero como ejercicio… nunca me encuentro encerrado y como dando vueltas, sé ponerle stop.

Qué es lo mejor que han dicho de ti

Se han dicho muchas cosas y son muy generosas pero a mí me atrae mucho la elegancia en ordenes generales. La elegancia estética, la elegancia lírica, la elegancia en la palabra. Sobre todo en el gesto, en el trato… pienso que cada uno puede ser de cualquier forma.

Puede ser simpático, soberbio, bueno, malo pero cualquiera de esas cosas pueden ser con o sin elegancia y tener una entrada y una salida elegante en cualquier circunstancia me parece fundamental en la vida. Me encanta que suceda y alguna vez me llamaron elegante y para mí fue muy importante ¡no sabía que estaba en esa categoría! (risas)

¿Qué es lo más bonito que te ha dado el público?

Que se hayan relacionado conmigo, que hayan sabido comprender que mi música y mis canciones nacen de un lugar muy íntimo y siempre van a reflejar eso y que mi intención no es influir, contagiar o contaminar a alguien con lo que a mí me pasa sino a mí me pasa esto y de esto nació esta canción. La pongo encima de la mesa para que ojalá si a vos te funciona para algo en tu camino te sirva y pase a ser tuya.

Que luego decidas venir a escucharla en mi voz, ¡fenómeno! Pero no es solamente a verme, venís a compartir conmigo. Y eso el público me lo ha brindado desde siempre y me encanta porque me quita muchas presiones de encima y me permite seguir disfrutando de hacer música.

Por eso en el escenario puedo llorar o enfadarme, lo que sea, me da espacio a hacer lo que siempre fui haciendo música. Es una relación muy eufórica pero no tiene ningún punto de histeria y eso es algo hermoso.

IMG_0829

Hace poco llenaste dos noches consecutivas el River Plate… cuéntanos cómo fue

Fue muy conmovedor y pasaron tantas cosas externas al publico, ajenas a mí, al espectáculo… Si los conciertos se hicieron fue por la magia y por la buena voluntad de todo el mundo. De decir esto lo vamos a vivir cueste lo que cueste porque el sábado llovió de una manera escandalosa, los aeropuertos cerrados y a las seis todo se calmó y el público reaccionó de una manera espectacular.

El lunes la ciudad estaba en llamas, a cinco kilómetros del estadio había un clima triste para nosotros y sin embargo el público se las apañó para ir al concierto y eso fue increíble. Más allá de un marco imponente lógico (50.000 personas cada noche) pero el nivel de emoción y de intensidad excedía a lo artístico. El mensaje no era ‘Abel sos un ídolo para nosotros’ el mensaje era ‘Abel acá estamos loco’.

Llegas a España concretamente Madrid y Barcelona… ¿Qué es lo que va a encontrar el público? No sé si nos puedes desvelar si te acompañará alguien…

Van a ser conciertos largos, como de hora y media, vamos a tocar con el formato eléctrico, viene toda la banda, dos guitarras, piano, bacteria, bajo, saxo y trompeta. Vamos a hacer pie en el último disco pero también repasaré toda mi carrera y también alguna pincelada de folclore.

Tengo una regla de oro con mis amigos cantantes, que es que cuando estamos en un lugar y alguien da un concierto, el que quiere va y canta o el que quiere va se toma una cerveza y no canta. Libertad absoluta, saben que amo cantar con ellos. Sorpresa para mí y para el público. Saben que vengo, lo mismo van todos … ¡lo mismo no va nadie! (risas)

A parte de la reedición del concierto del River ¿Estás pensando en próximo disco?

En España y Mexico se edita un CD y un DVD con el concierto del River en breve, en Argentina además irá con un libro. Estoy trabajando en el próximo álbum y pienso que será segunda mitad del 2019 cuando salga, estoy empezando a fantasear con productores y estoy escribiendo canciones.

IMG_9791

Images: Living Backstage, Sony Music, Abel Pintos RR.SS

Un comentario

Leave a Reply
  1. Más allá de la admiración y el cariño que le tengo a Abel (que es mi cantante favorito hombre), y tratando de ser lo más objetiva posible, tengo que decir que, ¡Si de bonitas entrevistas tenemos que hablar, ésta se lleva muchos premios!.
    Si hubiera sido la primera vez que leía sobre Abel, seguramente hubiese buscado más info sobre él, porque llevaste la entrevista de una forma hermosa, atrayente y atrapante, que dan ganas de conocerlo más.
    Me encantó su carta de presentación. ¿Qué mejor que saber de alguien desde su propio punto de vista?!.
    Aunque no tuve aún el placer de conocer a Abel en persona, sí, fui a la mayoría de los conciertos que dio en Buenos Aires, y diría que llega al punto de parecer sanador y liberador verlo en escena. Su música, su forma de transmitirla, su mensaje, su forma de hablar… Sin duda es de las personas que, como me ocurre con Malú, disfruto tanto de escucharlos hablar como de su música. Comunican desde la verdad, la calidez, la humildad, que en éstos tiempos donde todo es más ‘armado’, su manera de expresarse se agradece.
    Muchas gracias por tan bonito momento que nos hiciste pasar a los que te leímos, y por la forma en que se nota que trataste a Abel.
    Besoos!! ♥

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *